Maid Cibercafe Osaka

*Miro al camarero irse*
"Por mi hermano que éste cae"
*Espero a que me traiga el té y las pastas*

*Le llevo el té, un plato pequeño con algunas pastas y una hoja con un bolígrafo azul, tal y como ella pidió*
-Aquí tiene, señorita.
*Coloco sobre la mesa las pastas a su derecha, el té ante ella y deposito suavemente la hoja de papel y el boligrafo junto a las pastas*
-¿Desea algo más?
*Hago una reverencia*
"Estaría bien que hiciese lo que estoy pensando, aunque sería un pequeño problema en parte"

(off rol: gomen por la tardanza, tuve problemas con la Internet XD.)

-black wings: oh claro.- *guarda la libreta y el lápiz*

-black wings: claro que me encontraras en el instituto. siempre estoy en la azotea.

"-umbra: de'ja vu-"

-black wings: bueno me despido, nos veremos luego kuu-chan.

*paga las cosas se despide y sale del lugar*

- Bueno...
*Escribo en el papel mi número de móvil*
- Podrías llamarme cuando tengas tiempo... bueno, si es que esta noche no estás libre...
*Cojo una pasta y me la como mientras le guiño un ojo y me desabrocho un boton de la camisa*

*Una media sonrisa se dibuja suavemente en mi rostro*
"Tal y como me imaginaba"
*Tomo aire*
-No están permitidas las relaciones entre camareros y clientes, lamento tener que decirle esto.
*Hago una reverencia*
-Estamos a punto de cerrar. Si es tan amable de acabar pronto se lo agradeceríamos.
*De nuevo una reverencia, voy hacia la mesa donde estuvo sentada la niña. Tomo el dinero, lo llevo a la barra y lo dejo sobre un platillo*

*Un viento helado sopló sobre mi cuerpo inmóvil y congelado*
"Ni hablar del peluquín"
*Me como las pastas rapidamente e indignada y me bebo el té. Termino y me voy a la barra, pago, y cuando le voy a dar el dinero le meto el papel en el bolsillito del frac, donde guarda su reloj. Con una expresión que gracias al pelo no me vio, me fui*
- Hasta otra.
*Salí*

*Antes de que la joven saliera le dedico una reverencia. Tras esto me acerco a la entrada del vestuario y me quedo justo delante*
"Sería muy indecoroso entrar ahora y que ella se esté cambiando"
*Me aclaro la garganta*
-Señorita, no quedan clientes. Me gustaría ponerla al tanto de la situación, ahora que nos encontramos a solas y estamos más calmados.

"Espero que su reacción sea mejor que la que tuvo nada más presentarme"
*Continuo en pie junto a la entrada al vestuario y pronuncio con dulzura*
-thank you, my lady.

*Hago una reverencia, me acerco a una mesa y separo una silla para que tome asiento*
-Gracias por escucharme, ahora que está más calmada.

*Tomo aire*
-Señorita, antes hubo una equivocación. No me contrató el dueño de este local para trabajar aquí, sino sus tíos. He trabajado durante un año para ellos y, tras este tiempo, me han enviado para trabajar para usted.
*Me arrodillo a su lado con la mano derecha en el pecho*
-Por favor, acepteme como su mayordomo, Misa-sama.

*Me pongo en pie inmediatamente, me pongo a su espalda, le tomo una mano y la otra la deposito suavemente sobre su hombro. Le dedico una cálida sonrisa para animarla*
-Cálmese, por favor. Ahora no estará sola, me encargaré personalmente de que no sufra ningún daño.
*Quito la mano de su hombro y de otro bolsillo del frack saco otro pañuelo con el que enjugo sus pequeñas lágrimas*
-No tiene nada más que temer, joven ama.

-Como desee.
*Le tiendo una mano para ayudarle a levantarse*
"Sus tíos tenían razón, debo cuidar mmuy bien de ella"

*Cojo mi maleta y salgo tras ella*
-¿Me permite hacerlo, señorita?